José Mª Lucas de Dios. Catedrático de Filología Griega (UNED)
En sus momentos fundacionales (último decenio del s. XVI) los teóricos de la música -entre ellos el padre de Galileo Galilei– pretendían la recuperación de la vieja tragedia grecolatina de Esquilo, de Sófocles, de Eurípides o de Séneca, mediante la creación de un producto artístico paralelo. Esa nueva criatura fue la ópera. Y el Mundo Clásico sirvió de marco cultural: no sólo aportó el esquema formal sino también la materia narrativa para los argumentos de este nuevo tipo de Teatro. Los grandes héroes míticos, los destacados personajes históricos, la ingente población de criaturas literarias, incluso los sesudos filósofos, subieron a escena dispuestos a recontar viejas historias convertidas ya en modelos del bien y del mal, del heroísmo y de la bellaquería, del amor y del desamor. Solo que ahora la acción dramática se iba a apoyar en un recurso que hacía más intensas las emociones: la música.
Como es bien sabido, la ópera es uno de los grandes campos de la creación artística y cultural. Básicamente es una maravillosa fusión de texto y música, aunque Wagner la calificaba de “obra de arte total” (Gesamtkunstwerk), dado que también participan la danza y las diversas artes plásticas en la escenografía.
En sus momentos fundacionales (último decenio del s. XVI) los teóricos de la música -entre ellos el padre de Galileo Galilei– pretendían la recuperación de la vieja tragedia grecolatina de Esquilo, de Sófocles, de Eurípides o de Séneca, mediante la creación de un producto artístico paralelo. Esa nueva criatura fue la ópera. Y el Mundo Clásico sirvió de marco cultural: no sólo aportó el esquema formal sino también la materia narrativa para los argumentos de este nuevo tipo de Teatro. Los grandes héroes míticos, los destacados personajes históricos, la ingente población de criaturas literarias, incluso los sesudos filósofos, subieron a escena dispuestos a recontar viejas historias convertidas ya en modelos del bien y del mal, del heroísmo y de la bellaquería, del amor y del desamor. Solo que ahora la acción dramática se iba a apoyar en un recurso que hacía más intensas las emociones: la música.
En la UNED se ha constituido un Proyecto de investigación (“El Mundo Clásico en la Ópera”) orientado a encarar el estudio en profundidad de este campo. Y, en estrecha colaboración con la Biblioteca y la Mediateca, pretende ir creando un fondo bibliográfico y musical adecuado, que podrá utilizar toda nuestra comunidad universitaria. Resultado de esta colaboración la Mediateca ha realizado un díptico que recoge todos los audiovisuales (DVD y CD) sobre el mundo clásico en la ópera disponibles en la sección.
Si lo desea, puede descargarlo en pdf
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